NUEVAS INVESTIGACIONES SOBRE EL TESTEO EN ANIMALES
Bueno, para que los millones de fumadores sacien su bastante tonta adicción, miles de perros, gatos, monos, entre otros, son puestos en cámaras cerradas en donde se les inunda con humo de cigarro para ver cuanto resisten sus pulmones, la duración del encierro en la cámara de humo es hasta el momento de la muerte del animal causada por afixia. Luego de sacar el cadáver se hacen estudios a sus pulmones para luego compararlos con lo que podría pasar en los pulmones humanos.
Científicos de la Universidad de Yales (EEUU) usan a ratones y ratas para inyectar nicotina en su abdomen, colocarla directamente en agujeros cortados en sus cráneos, u obligandolos a beber agua potable con la droga para medir los efectos que esta tiene en el ser humano.
También los cuelgan de su cola para ver si el consumo de nicotina calma la ansiedad y los comportamientos depresivos.
Cientos de agrupaciones mundiales están trabajando para erradicar y poner fin a todos los crueles experimentos con animales, pero eso no es suficiente, se necesita que las personas dejen de lado sus necesidades superficiales y comienzen a darse cuenta de que no son los unicos seres que piensan y sienten en este mundo...
Correspondencia: ALAMO
AYUDA PARA ACTIVISTAS DE GREENPEACE EN JAPÓN
"El pasado viernes 20 de junio, la policía japonesa arrestó a dos activistas de Greenpeace que hace más de un mes denunciaron el tráfico ilegal de carne de ballena dentro del programa de caza de cetáceos respaldado por el gobierno japonés.
Los dos activistas, Junichi Sato, de 31 años, y Toru Suzuki, de 41, son investigados por el supuesto robo de una caja con carne de ballena, presentada como evidencia en la denuncia que realizó Greenpeace el 15 de mayo pasado."
Los dos activistas, Junichi Sato, de 31 años, y Toru Suzuki, de 41, son investigados por el supuesto robo de una caja con carne de ballena, presentada como evidencia en la denuncia que realizó Greenpeace el 15 de mayo pasado."
Greenpeace.
¿Como puedes ayudar?
* Enviando una carta al primer ministro japonés, exigiendo la libertad de los activistas (aquí) y difundiendo esta información.
Y para la gente que gusta de los juegos, Greenpeace creó Mister Splashy Pants to the Rescue, en donde bellenas jorobadas recatan a los japoneses que la ayudaron.